Ayurveda: la ciencia del conocimiento de la vida.

Ayurveda: la ciencia del conocimiento de la vida.

La primavera inicia y con ella el tiempo fértil en los campos, un semblante renovado y nuevos proyectos. Los días de invierno dejaron kilos de más; empiezo a sospechar que fueron bastantes cuando las rodillas y caderas duelen justo cuando he comenzado a hacer un poco de actividad física. Descubrí que el método más efectivo para mí, es hacer un reajuste en mi alimentación diaria y con menos peso, podré activarme nuevamente.

El transitar de los 20, y la eminente llegada de los 30, ha estimulado un aire de compromiso con mi estado físico, mental y emocional. Por supuesto que mantener una actitud positiva y motivación a veces cuesta, lo que ha significado tiempos de responsabilidad entusiasta y otros, de los que no me siento muy orgullosa.

Desde hace tres años comencé a reducir el consumo de carnes en mi dieta, en casa el menú es vegetariano. En Alemania encuentro una gran variedad de restaurantes que ofrecen un rico menú vegetariano; así como en los supermercados opciones orgánicas y de cultivos biológicos. En ese transitar, descubrí y me apasioné con el sistema de nutrición ayurveda que conocería en la práctica de la meditación.

Qué es Ayurveda?

Ayurveda es una ciencia holística, que contempla una visión global del ser humano. Con una antigüedad de alrededor de seis mil años, surge en la India como sistema médico creado por monjes que buscaban nuevas maneras de ser saludables. A través de miles de años de observación, reunieron todas sus conclusiones y consejos y los preservaron para futuras generaciones.

Ésta colección de sabiduría ancestral fue conocida como «la ciencia del conocimiento de la vida» por su traducción del sánscrito. Posee la compilación de literatura médica y farmacopea más extensas del mundo.

Éste acercamiento holístico a la salud, asume una relación intrinseca entre el cuerpo, mente y espíritu tomando en consideración sus procesos como un conjunto. Éste principio nos permite encontrar balance, sentirnos vitales y felices con un mínimo esfuerzo. Ayurveda, usa la alimentación para sanar y prevenir enfermedades; asegura que una alimentación pobre es la principal causa de toda enfermedad.

Diferencia tipos de cuerpo de acuerdo a la energía predominante, «doshas»: Vata, Pitta y Kapha, y clasifica los alimentos en tres grupos: Sátvicos, Tamásicos y Rajásicos.

Señala que alimento es todo lo que entra por todos los sentidos: qué elegimos escuchar? la música que nos apasiona, bellas historias; qué elegimos ver? lugares bellos, admirar la naturaleza, etc., todo lleno de sencillez y humildad. Después de todo, el alimento no solo nutre el cuerpo, afecta así mismo la mente y nuestro estado de conciencia.

El objetivo es lograr un equilibrio en el consumo de los tres grupos alimenticios. Para aquellos consumados en el camino espiritual, la finalidad es lograr una transición de alimentos Rajásicos y Tamásicos a los alimentos Sátvicos.

Alimentos Sátvicos, Rajásicos y Tamásicos.

Alimentos Sátvicos, son todos aquellos en los que podemos imaginar con facilidad cómo ha llegado el sol hacia ellos. Ayudan a mantener el cuerpo saludable, entre ellos, alimentos crudos, naturales, cultivados ecológicamente sin pesticidas ni fertilizantes de origen químico. Ejemplo: frutas, verduras, raíces y tubérculos, semillas.

Alimentos Rajásicos, crean sentimientos de apego, impulsan al hombre a ser visceral. Nos excitan y nos vuelven agresivos. Ejemplo: café,  azucar blanca, harina blanca, alimentos salados, demasiado dulces ó picantes.

Alimentos Tamásicos, provocan sentimientos de tristeza, desaceleran la mente y adormecen los sentidos. Generan pesadez al requerir de mucha energía del cuerpo para ser digeridos. Ejemplo: carnes, alimentos demasiado grasos, frituras, comidas procesadas, alcohol.

Muchos estilos de meditación recomiendan la reducción del consumo de carnes, de preferencia una alimentación vegetariana que contribuya a un mayor progreso a niveles avanzados de conciencia y al desarrollo de compasión hacia todos los seres vivos.

No me gustan los rollitos y me incomoda que la ropa me ajuste, tampoco creo en las dietas que prometen maravillas en poco tiempo; soy consciente de que el cuerpo necesita nutrientes para un óptimo funcionamiento y que lograr un balance requiere de paciencia y perseverancia. En la sección Bienestar compartiré deliciosas y saludables recetas para una dieta balanceada, elaboradas con ingredientes orgánicos, amor y desde el calor del hogar.

LH.

 

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